Al ser Fallas y estar muy cercano el día de San José, tenía el día libre. Así que salí a la calle a pasear y hacer unos recados, todavía con la nostalgia de aquellos capazos rondándome por la cabeza. Y ¿qué me encuentro en una tienda al girar la esquina? Pues un capacito gracioso, de esparto, sin un solo añadido ni adorno; listo para ser personalizado y convertido en algo encantado. Aquello tenía que ser una especie de señal. Así que lo compré, busqué por casa telas, borlas, puntillas, rasos, fieltro... cualquier cosa que me pudiera servir, y como si fuera de nuevo la niña dispuesta a estrenar capazo, yo misma creé uno para mí, para volver a usarlo en Pascua. Y tal y como me hicieron a mi de pequeña, conseguí que fuera a juego con la ropa que aquel día usaría.
Poco después de las Fallas ha venido la Semana Santa y las Pascuas, y he estrenado y usado mi capazo. Lo sorprendente es que... ¡le ha encantado a todo el mundo! Todos recordaban haber tenido o visto uno parecido de pequeños. Algunas amigas me han pedido capazos también para ellas, y de nuevo, les ha encantado el resultado. Así que he seguido haciendo para personas allegadas, mientras algunas de ellas me comentaban que era una gran idea, que por qué no hacer más capazos y cestos así. Y yo he decidido que por qué no compartir su encanto con muchas más personas, y abrir esta pequeña inspiración que he encontrado, a través de un blog, dispuesta a recibir encargos y hacer esos pequeños y divinos deseos realidad.
Soy una de las afortunadas en lucir uno de los primeros modelo y,la verdad, estoy encantada, y segura de que...¡nadie tiene uno igual!
ResponderEliminarSon preciosos, tengo uno de su primera colección y estoy encantada, y lo mejor es que es único para mi.
ResponderEliminarUna gran idea! Preciosos la verdad ? Dónde tengo que encargar el mio ? Ya se de que tonos lo quiero para que además de combinarme encaje perfectamente conmigo. Eres una gran artista ! Creativa y con mucho glamour.
ResponderEliminarPreciosos todos, enhorabuena.
ResponderEliminarSoy una de las receptoras de la primera tanda de cestos y me encantó! Es una idea súper original y muy cómoda, detallista y bien acabado. ¡Una maravilla, enhorabuena!
ResponderEliminarMi enhorabuena porque los detalles son muy coquetos, muy dulces y con los colores muy bien seleccionados. Vamos, estás hecha una artista, ¡sigue con ellos!
ResponderEliminarEnhorabuena Inma. Todos son preciosos y ademas exclusivos. No hay 2 iguales. Felicidades. Continua con tu proyecto
ResponderEliminarEl trabajo hecho con gusto y amor, siempre es una creación original y única. Adjetivos que describen a la creadora de estos maravillosos cestos, una mujer moderna, trabajadora y emprendedora que logra hacernos soñar con cada una de sus creaciones. Y espero que siga así porque la recompensa del trabajo bien hecho es la oportunidad de hacer más trabajo bien hecho. Adelante!!!!
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